26 Director del colegio lo salvó de la expulsión
26 DIRECTOR
DEL COLEGIO LO SALVÓ DE LA EXPULSIÓN
Escrito
por Berthing León Villanueva, Lechería, Venezuela, 10 abril 2018
Corría el año 1962 cuando Bert con sus 14 años
y a punto de cumplir 15 cursaba el 4° de Secundaria y por elección de sus
compañeros era el Representante de su salón de clases y Presidente da la
Comisión Pro-Graduación de su promoción. Por extrañas circunstancias
representaba a todos, desde los más tranquilos hasta los más revoltosos, “reclamones”
(SIC), protestantes y rebeldes de su salón, que era ya mucho decir, porque algunos
“alumnos-compañeritos” eran unas verdaderas joyitas, por su “comportamiento no
ejemplar” precisamente, que lo terminaban de rematar con sus tremenduras dignas
de quitarse el sombrero.
Compartían el mismo salón unos personajillos
como el Cholo Luis Ramírez de Miraflores, el Burro Erasmo Herrera de Pocsi, El
loco Jesús Salazar de Cerro Colorado, el loro Arango de la Apacheta, el Pichón
Pato de Tahuaycani, y paro de contar, es decir: los adolescentes más espectaculares
en cuanto a su inventiva y talante pero que adolecían de juicio y cordura.
Claaaaaro que también había compañeros
tranquilos y muy buenos estudiantes como Emilio Francisco Ortiz Núñez, Jorge
López Cutyre (mi compadre), el Turco Ahíto, Jorge Barriga, Miguel Torreblanca
Vargas, César Miranda Chirinos, Nicolás Loayza, Duilio Salinas, Jorge Rossand
Galdos (Luisdicisis).
Algunos compañeritos, muy buenos también de
verdad-verdad, ya no estaban con nosotros porque habían “desertado” en el 3er.
año para incorporarse al Colegio Militar Francisco Bolognesi, tales como El
Coco Jorge Gómez Mogrovejo (le llamábamos Coco por Jorge y también era un coco por
cerebrito), el Colorao George Febres, César Novoa y tal vez alguno otro que no
recuerdo.
A finales del mes de abril los Alumnos del Colegio
Independencia Americana (Creado por decreto del Libertador Simón Bolívar el 6
de Agosto de 1825) iniciaron una huelga estudiantil y tomaron las instalaciones
del colegio, cerraron todos los portones y puertas y no permitían la entrada y
salida de nadie.
¿Qué cosa piden? ¿Es legal lo que piden? ¿Es
justo? ¿Por qué llegaron a eso? ¿Han cumplido con los extremos de Ley para
llegar a esa medida de presión? ¿Si? ¿No?. Pero: ¿A quién carajo le importa
eso? ¿A los estudiantes? ¿Tú crees? A los padres SI, no a todos porque algunos
padres eran “bochincheros viejos” o viejos bochincheros. ¿Cuántos días llevan
en huelga? Una semana ¿Dónde duermen? Allí en el cole, ¿Cómo comen? Sus madres
les llevan comida.
En vista de que el conflicto no tenía visos de
solucionarse, los estudiantes pidieron apoyo a sus protestas por parte de los
alumnos de otros colegios y en tal sentido dos Alfeñiques (Se les llamaba así
por el color Kaki oscuro de su uniforme) llegaron al colegio de Bert, lo
contactaron a la hora de salida del mediodía (para ir a sus casas a almorzar) y
le dijeron que habría una asamblea en el auditorio a la 1, Bert les dijo allí estaría
para oírlos y decidir. Yyyyy…. ¿por qué no contactaron a los del 5to. Año? Le
dijeron que los del 5to. estaban en la onda de graduarse y dejar el colegio (y
el bochinche).
Bert almorzó en su casa y en cuanto terminó, se
fue “volando” al colegio diciendo “que tenía que estudiar”, buscó a los que
venían de muy lejos, Sabandía, Pocsi, etc; en su mayoría eran sus compañeros
revoltosos en el salón de clases, les encargó sus útiles (Libros y cuadernos) y
les dijo que concurriría a la asamblea a la que lo habían invitado los alfeñiques.
Bert corrió hasta el colegio Independencia que
distaba como 1.5 kilómetros desde su cole; se identificó en el portón de
entrada y lo hicieron pasar al presídium de la asamblea en el auditorio, junto
a los directivos de los estudiantes huelguistas de ese colegio. Bert pidió la
palabra para dirigirse a los estudiantes, los alentó en su lucha y se
comprometió a paralizar las actividades en su colegio para salir formados y
marchando hasta el Colegio Independencia. Los huelguistas lo aplaudieron; Bert se
despidió y bajo del escenario rápidamente para salir a la calle y echar a
correr las aproximadamente 12 cuadras que separaban esas edificaciones.
Cuando llegó a su colegio eran las 2:07 y encontró
la puerta cerrada porque una de las normas más estrictas que se cumplía allí
era la puntualidad: a las 2:05 se cerraba la puerta de acceso de los alumnos y
el portero se retiraba a otras labores, así es que NO SE PODÍA ENTRAR.
Cuando Bert vio la puerta cerrada, no se quedó
pensando, se dirigió hacia la parte posterior del colegio, donde había un
paredón delimitando el amplio patio de grama que quedaba detrás de los baños. Trepó
el paredón y brincó para dentro del colegio, caer en cuclillas en la grama y
rodar para amortiguar la caída.
Se levantó “como un rayo”, se sacudió la grama
y la tierra, corrió hacia el edificio y se introdujo en el baño, fue directamente
hacia la fila de los 12 lavamanos muy bien cuidados y conservados. Abrió la
llave para lavarse y refrescarse del sudor que traía por la carrera realizada y
cuando se estaba secando con su pañuelito blanco, sonó a su espalda la voz del
Director del colegio que le decía:
- Pero qué está usted haciendo aquí Señor
León? Por qué no está en el salón de clase? Me hace el favor de terminar y se
va inmediatamente a su salón.
Y hablando y haciendo, Bert fue raudamente a su
salón, pero más que para hacer caso al Director era para hacer circular la
decisión de suspender las clases en el recreo de las 3:30 para formar los
alumnos en el patio y salir a la calle. En eso estaba cuando a las 2:45 sonó el
timbre y los Profesores de Control de Estudios fueron por los salones para
informar a los Profesores de Aula que había formación en el patio Principal.
Bert y sus compañeros “los revoltosos” no entendían qué podía estar pasando y
tuvieron que salir junto con los demás.
En la formación se presentó el Director y demás
autoridades del colegio para informar a los alumnos y profesores que las clases
estaban suspendidas hasta nuevo aviso, así es que debían retirarse ya en ese
momento los que vivían cerca y los que usaban transporte público, así como
podían quedarse los que usaban transporte familiar. Pero cuando rompieron
filas, los del 5° salieron del cole (en grupo claro) y una vez afuera se
formaron y caminaron por el medio de la calle con dirección al colegio de los
huelguistas donde llegaron para ser recibidos con aplausos.
¿Qué cómo se arregló eso? Al día siguiente se
suspendió la huelga. ¿Cómo lo arreglaron? Pero si ni siquiera me recuerdo por
qué era la huelga.
Después,
Bert se enteró que el Director suspendió las clases porque recibió una llamada
telefónica donde lo alertaban sobre la toma del colegio esa tarde, por que un
alumno de ese colegio estaba en la asamblea de los huelguistas del
Independencia y dieron el nombre de ese alumno: Bert.
El Director dijo:
-
IMPOSIBLE.
Yo vi a Bert en los baños, lo vi cuando salió del servicio higiénico y se
estaba lavando las manos. Hasta hablé con él. Lo llamé por su apellido, NO
PUEDE SER, no se le puede expulsar porque NO ERA ÉL.
Y NO
LO EXPULSARON
INCREIBLE: La monja Rivero salvó de la
expulsión a BLV.
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